El Vaticano actualiza su postura ante las vírgenes que lloran sangre
El nuevo comunicado que lanzó Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF) el pasado 17 de mayo hace alusión a la manera en la que se podrá proceder desde las instituciones eclesiásticas para abordar este tipos de fenómenos considerados como «sobrenaturales» desde 1978.
La misiva sostiene que los obispos ya no podrán actuar de forma independiente cuando se enfrenten a informes de tales fenómenos y deberán consultar antes de investigar.
Esta transferencia del «poder» para reconocer la naturaleza de estos inusuales eventos quedará en manos del Papa y el Vaticano; es decir, sólo podrán ser ellos los que reconozcan si son ciertos o se trata de fraudes.
También despojó a los obispos del poder de reconocer la naturaleza «sobrenatural» de las apariciones y otros acontecimientos supuestamente divinos.
Estos tipos de eventos sobrenaturales, como la aparición de «estigmas» o heridas de la crucifixión de Jesús, en las manos y los pies de personas santas se han convertido desde tiempos inmemoriales en la base de santuarios y peregrinaciones de muchas comunidades.
Sobre las apariciones de la Virgen María, manifestó que «no siempre son reales» y que le gusta verla «señalando a Jesús» en lugar de llamar la atención sobre sí misma.
Por su parte, el cardenal Víctor Manuel Fernández relató a periodistas que este tipo de sucesos deben abordarse con extrema precaución, ya que pueden ser fraudulentos y explotarse con fines de «lucro, poder, fama, reconocimiento social u otro interés personal», publicó el Cronista.
Creado:
27 mayo, 2024







