Máximo Córdoba Vizcarra, la promesa santiagueña que nada con esfuerzo, sueños y corazón
A los 13 años, Máximo Córdoba Vizcarra no solo representa a Santiago del Estero, sino también la constancia, el sacrificio y el futuro de la natación argentina. El joven nadador, integrante del equipo del Natatorio Olímpico Madre de Ciudades, fue convocado nuevamente por la Confederación Argentina de Deportes Acuáticos (CADDA) para integrar la Selección Nacional en el Torneo Internacional Promesas Olímpicas, que se disputará en Asunción, Paraguay, del 10 al 12 de julio.
Detrás de esta tercera convocatoria consecutiva (2023, 2024 y 2025) no hay casualidades: hay años de trabajo silencioso, madrugadas de entrenamiento, días completos de disciplina y una pasión que se transformó en motor de vida. “Comencé natación desde los 4 años; primero no me quería meter a la pileta, tenía miedo, pero ahora no quiero salir del agua”, confesó Máximo en una entrevista exclusiva con El Deportivo de Radio LV11.
Los logros hablan por sí solos. En su categoría, brilló en los 100 y 200 metros libres con tiempos destacados, mejorando sus propias marcas personales. “Estaba haciendo 1:06 en entrenamientos, y en competencia bajé a 1:03. Fue una felicidad inmensa”, recordó.
La Lic. Josefina Brandowsky, su entrenadora, fue clara al explicar que los resultados no llegan por arte de magia, sino por un proceso riguroso. “Máximo entrena de madrugada antes de ir al colegio, vuelve por la tarde a la pileta y completa con gimnasio a la noche. Es un compromiso sostenido en el tiempo, acompañado por su familia y por un equipo técnico comprometido”, señaló.
La entrenadora también destacó el rol clave del Estado provincial: “Contamos con una infraestructura única en el país. Gracias al apoyo de la Secretaría de Deportes y al gobernador Gerardo Zamora, el Natatorio Olímpico Madre de Ciudades se posiciona como una base fundamental para el desarrollo de talentos como Máximo”.
El torneo en Paraguay no es un evento más. Lleva el nombre Promesas Olímpicas, y para un joven que sueña con llegar a los Juegos Olímpicos y romper récords mundiales, se trata de una verdadera ventana al futuro.
Con cada brazada, Máximo Córdoba Vizcarra demuestra que el talento sin dedicación no alcanza, y que los sueños más grandes se construyen día a día, en silencio, con humildad y con el apoyo de una comunidad que cree en él.
Hoy, la celeste y blanca vuelve a teñirse de santiagueño. Y el agua, una vez más, reconoce al que lucha con todo el corazón.
