Apresan a falso kinesiólogo en Pinto: lo acusan de usurpar título y ejercer ilegalmente la medicina
Una paciente accidentada habría revelado las secuelas sufridas tras sus prácticas. El detenido es oriundo de Icaño y quedó a disposición de la Justicia.
Un hombre fue detenido ayer por orden judicial, acusado de ejercer ilegalmente la medicina y usurpar el título de kinesiólogo. La aprehensión fue realizada por la Policía en la localidad de Pinto, y el sospechoso fue identificado como Leguizamón, residente de un barrio de Icaño, departamento Avellaneda.
La investigación fue impulsada por la fiscal María Emilia Ganem, con intervención de la jueza de Control y Garantías, Ana María González Ruiz, quien firmó la orden de allanamiento que culminó en la detención del individuo a las 17 horas del miércoles.
El caso se destapó tres meses atrás, cuando una mujer que se recuperaba de una compleja cirugía en una pierna, tras un accidente vial, denunció ante la Justicia haber recibido prácticas de rehabilitación deficientes en un consultorio de Pinto.
Las secuelas en su extremidad inferior generaron sospechas sobre el tratamiento recibido. La paciente habría alertado sobre la falta de profesionalismo del supuesto kinesiólogo, encendiendo las alarmas de las autoridades judiciales y del propio Colegio de Kinesiólogos.
Según fuentes confiables, esa entidad profesional colaboró con la causa aportando documentación que indicaría que Leguizamón no cuenta con formación académica habilitante ni matrícula en regla.
Bajo los cargos de “usurpación de título” y “ejercicio ilegal de la medicina”, la Fiscalía de Añatuya inició una investigación que derivó en la detención del sospechoso, quien fue trasladado a una comisaría local y examinado por Sanidad Policial.
La situación procesal de Leguizamón es delicada y podría agravarse si la denunciante se constituye como querellante. Anoche, fuentes del Ministerio Público analizaban tomarle declaración indagatoria mañana viernes, una vez finalizadas las actuaciones preliminares.
Desde su entorno, trascendió que el acusado habría intentado justificar su accionar señalando que nunca se presentó como kinesiólogo, sino como un “trabajador del sistema muscular y óseo”. No obstante, los investigadores subrayan que sus funciones requerían una titulación profesional.
Mientras se delinean las estrategias legales de ambas partes, Leguizamón permanece detenido y todo apunta a que, llegado el momento de comparecer ante la fiscal Ganem, opte por guardar silencio, siguiendo el consejo de su abogado.
La causa continúa abierta y no se descartan nuevas imputaciones si se determina que el falso profesional atendió a más pacientes.
