Argentina conmemora 171 años de su Constitución Nacional, historia democrática del país
El 1 de mayo marca un día de especial significado para Argentina, ya que se conmemoran 171 años desde la creación de su Constitución Nacional. Este documento fundamental fue sancionado el 1 de mayo de 1853 en la ciudad de Santa Fe, durante la presidencia de Justo José de Urquiza.
La Constitución Nacional sentó las bases de un sistema de gobierno representativo, republicano y federal, estableciendo la división de poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Inspirada en los ideales del liberalismo clásico y la doctrina política del federalismo, fue redactada con la influencia de los ensayos de Juan Bautista Alberdi y la Constitución de los Estados Unidos.
Este hito histórico representó un esfuerzo colectivo y visionario por parte de los líderes de la época, quienes reconocieron la necesidad de establecer un marco legal sólido que garantizara los derechos básicos y las libertades individuales de todos los habitantes del suelo argentino.
El preámbulo de la Constitución reconoce al pueblo y a sus representantes como la fuente legítima del poder, así como la preexistencia de las provincias cuyos representantes contribuyeron al poder constituyente.
A lo largo de los años, la Constitución Nacional ha sido un faro de la democracia en Argentina, guiando el rumbo del país hacia la protección de los derechos humanos, la justicia y el Estado de derecho. En este aniversario, se renueva el compromiso de mantener y fortalecer los principios y valores consagrados en este documento histórico, que sigue siendo la piedra angular de la sociedad argentina.
El 1 de mayo marca un día de especial significado para Argentina, ya que se conmemoran 171 años desde la creación de su Constitución Nacional. Este documento fundamental fue sancionado el 1 de mayo de 1853 en la ciudad de Santa Fe, durante la presidencia de Justo José de Urquiza.
La Constitución Nacional sentó las bases de un sistema de gobierno representativo, republicano y federal, estableciendo la división de poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Inspirada en los ideales del liberalismo clásico y la doctrina política del federalismo, fue redactada con la influencia de los ensayos de Juan Bautista Alberdi y la Constitución de los Estados Unidos.
Este hito histórico representó un esfuerzo colectivo y visionario por parte de los líderes de la época, quienes reconocieron la necesidad de establecer un marco legal sólido que garantizara los derechos básicos y las libertades individuales de todos los habitantes del suelo argentino.
El preámbulo de la Constitución reconoce al pueblo y a sus representantes como la fuente legítima del poder, así como la preexistencia de las provincias cuyos representantes contribuyeron al poder constituyente.
A lo largo de los años, la Constitución Nacional ha sido un faro de la democracia en Argentina, guiando el rumbo del país hacia la protección de los derechos humanos, la justicia y el Estado de derecho. En este aniversario, se renueva el compromiso de mantener y fortalecer los principios y valores consagrados en este documento histórico, que sigue siendo la piedra angular de la sociedad argentina.





