Joven emprendedora de Bandera conquista el mercado con sus alfajores artesanales
¡Un ejemplo de emprendimiento y dedicación que inspira a seguir luchando por los sueños!
Hace un poco más de dos años, Diana Petrelli tuvo una brillante idea que hoy la posiciona como una de las emprendedoras más destacadas en su ciudad: la elaboración de alfajores artesanales de alta calidad. Con esfuerzo, dedicación y mucho corazón, Diana transformó su pasión en un negocio que cruza fronteras y conquista paladares en Argentina y el exterior.
Desde sus inicios, Diana se capacitaron y estudiaron el mercado para ofrecer un producto premium. «Busqué que mis alfajores sean dulces y amables, como cada habitante de esta tierra», comenta con entusiasmo en una entrevista exclusiva en fm San Francisco. Sin maquinaria industrial, mantiene un proceso totalmente artesanal, lo que garantiza la calidad y autenticidad de cada alfajor.
El boca a boca ha sido una de sus principales herramientas de crecimiento. Gracias a la afluencia de turistas y visitantes en Bandera, sus alfajores han viajado a diferentes puntos del país, incluyendo La Rioja, Salta, Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe, Formosa, Santa Cruz y La Pampa. Además, su presencia se extiende más allá de las fronteras argentinas, llegando a países como Alemania, España, Brasil, Estados Unidos, Italia y Canadá, donde clientes particulares y negocios disfrutan de sus productos.


Diana ofrece una variedad de sabores, destacándose el dulce de leche con frutos rojos, Nutella y ganache de café y maracuyá. Su sabor estrella, sin dudas, es el alfajor con Nutella, que encanta a niños y adultos por igual. La producción semanal alcanza las treinta docenas, aunque en temporadas altas y pedidos especiales, esa cifra se incrementa notablemente.
A pesar del éxito, la joven emprendedora mantiene un ritmo de trabajo exigente, conciliando su negocio con la crianza de sus hijos y su salud. «Me dedico con mucho pulmón y amor, y todo lo hago a mano, con ingredientes de calidad y sin conservantes», explica. Además, cuenta con su carnet sanitario y actualmente trabaja en la regularización de su marca, pasos fundamentales para expandirse y formalizar su emprendimiento.
Su sueño a futuro es adquirir maquinaria que le permita aumentar su capacidad de producción y llegar a más mercados, siempre preservando la esencia artesanal que caracteriza sus alfajores. «Es difícil invertir en maquinaria en Argentina, pero sigo soñando y trabajando para cumplir mis metas», afirma con determinación.
Diana también destaca la importancia de la salud y los chequeos médicos, compartiendo su experiencia personal y promoviendo la prevención, especialmente entre las mujeres.
Su historia refleja que, con perseverancia y pasión, es posible transformar una idea en un negocio que cruza fronteras y genera sonrisas en cada rincón del mundo. Para quienes deseen probar sus deliciosos alfajores, pueden encontrarla en Instagram como alfajores.bandera y realizar pedidos con anticipación.
¡Un ejemplo de emprendimiento y dedicación que inspira a seguir luchando por los sueños!





