En busca de mis raíces: el viaje de Andrea para reencontrarse con su historia familiar en Santiago del Estero
Andrea Alejandra Dioguardi, nacida Norma Beatriz Agüero en 1971 en Trelew, comenzó una emotiva búsqueda de sus raíces y su historia familiar en Santiago del Estero. Aunque siempre supo que era adoptada, fue hace dos años, al solicitar su acta de nacimiento, cuando encontró por primera vez los nombres de sus padres biológicos: Clodomiro Agüero y Virginia Raquel Ríos. Esta revelación desencadenó en ella un anhelo profundo por conocer sus orígenes, impulsándola a recorrer su pasado en busca de una conexión que había permanecido oculta.
La historia de Andrea se entrelaza con el espíritu de Santiago del Estero, un territorio conocido por sus lazos familiares y sus profundas tradiciones. Este viaje de redescubrimiento no solo es un esfuerzo por encontrar a sus padres biológicos, sino también por revalorar la importancia de la familia y el sentido de pertenencia en tiempos de cambio.
A sus padres los recuerda jóvenes, apenas de 17 y 19 años cuando ella nació. Aunque oriundos de Santiago, la vida los llevó a establecerse en el barrio «La Laguna» de Trelew, en Chubut. «¿Qué pasó? ¿Qué los llevó allí? ¿Por qué no pude conocerlos?», se pregunta Andrea, enfrentando las incógnitas de una historia que hoy busca reconstruir pieza por pieza.
Andrea no viaja con resentimiento, sino con la firmeza de alguien que busca respuestas y comprensión. Al visitar Santiago del Estero, se enteró de que su tía, María Susana Agüero, había fallecido recientemente y que dejó tres hijos, posibles eslabones de su familia perdida. «Necesito localizarlos», expresa Andrea, convencida de que estos lazos familiares le permitirán comprender mejor el pasado que alguna vez la separó de sus padres.
Esta historia resalta el valor de la familia y la memoria en una tierra como Santiago del Estero, donde las raíces no son solo un símbolo de identidad, sino un testimonio de vida y fortaleza. Andrea representa a muchos que, al igual que ella, emprenden un camino hacia el reencuentro y el redescubrimiento de su historia familiar, recordándonos que el vínculo con nuestros orígenes nunca se pierde del todo, sino que permanece en el corazón, esperando ser redescubierto.
Fuente: El Liberal
Creado:
29 octubre, 2024