Beltrán conmocionada: barrabravas “ferroviarios” detenidos tras destruir el Registro Civil; dijeron que les pagaron $50.000
La violencia ligada al accionar de los grupos denominados barras bravas volvió a sacudir el interior santiagueño. En la madrugada del domingo, un grupo de al menos diez integrantes de la barrabrava de Central Córdoba protagonizó un violento ataque contra el Registro Civil de la ciudad de Beltrán, provocando destrozos materiales de consideración.
Tras una rápida investigación de la Dirección General de Investigación de la Policía de la Provincia, siete sospechosos fueron detenidos luego de múltiples allanamientos realizados en el barrio Congreso de la ciudad Capital. Los detenidos fueron identificados como Marcelo M. (33), Javier N. (31), Jairo F. (30), Ramiro P. (34), Joaquín C. (30), Nicolás A. (30) y Alberto N. (26).
Según trascendió, los acusados habrían confesado a los uniformados que recibieron $50.000 cada uno por parte de una mujer identificada como Marcela Castillo para viajar hasta Beltrán y ocasionar los destrozos.
La Fiscal Coordinadora por Banda y Robles, Dra. Natalia Saavedra, lleva adelante la investigación judicial. El episodio comenzó cuando Humberto Brito, propietario del inmueble donde funciona el organismo, denunció que los atacantes irrumpieron en el lugar y destruyeron mobiliario, computadoras, puertas y documentación oficial.
Antes del ataque, el grupo intentó ingresar sin autorización a una escuela donde se desarrollaban los comicios locales, con el pretexto de “supervisar” el desarrollo electoral. La policía apostada en el lugar les impidió el acceso, ya que ninguno figuraba como elector en el padrón de ese establecimiento.
Horas más tarde, los sujetos se dirigieron al Registro Civil, donde primero confrontaron con la hija del dueño y luego regresaron con mayor violencia. Testigos, imágenes de cámaras de seguridad y fotografías aportadas por vecinos permitieron identificar a los agresores.
El juez de Control y Garantías de La Banda, Dr. Gino Niccolai, ordenó los allanamientos que derivaron en las detenciones y el secuestro de dos vehículos utilizados para el traslado: un Chevrolet Prisma verde y una Ford EcoSport negra.
Los acusados permanecen alojados en sede policial y en los próximos días serán trasladados al Ministerio Público para prestar declaración como imputados. La causa sigue su curso mientras las autoridades intentan determinar los motivos reales detrás del violento episodio.





