Un emprendimiento local se encuentra entre los tres finalistas de un importante concurso de proyectos gastronómicos integrales de Argentina
Este martes pasado el jurado del reconocido concurso Prix Baron B – Édition Cuisine anunció a los tres finalistas de la quinta edición de este premio que continúa consolidándose como una referencia en el ámbito culinario.
Después de las presentaciones y un apasionado debate que, no solo se centró en los platos, sino también en el reconocimiento de los proyectos integrales por su enfoque en la materia prima, la sostenibilidad, las comunidades que los rodean y el medio ambiente, se anunció a los 3 chefs y sus emprendimientos que competirán por el galardón mayor. Los elegidos fueron los siguientes:
— Ánima, un pequeño restaurante emplazado en la reserva El Trébol, en el Circuito Chico de Bariloche, provincia de Río Negro, comandado por la pareja conformada por Emanuel Yañez García y Florencia Lafalla.
— Amasijo, el proyecto gastronómico de Agustín Kuran ubicado en Santiago del Estero, que trabaja con una cocina regenerativa de triple impacto.
— Bajo Llave 929, de Enrique Sobral, un restaurante a puertas cerradas de Concepción del Uruguay, en la provincia de Entre Ríos, que busca difundir los sabores, los aromas y los colores de la Mesopotamia.
Los tres proyectos participarán de la final de los premios, que será el 8 de septiembre en el Alvear Palace Hotel, en Buenos Aires. Allí, prepararán sus recetas en vivo para que luego el jurado determine quién de ellos es el ganador. Al igual que el año pasado, no hubo una proteína obligatoria que deba incluirse en el plato. Gracias a esta libertad en la elección de ingredientes, los concursantes lograron desplegar toda su creatividad, conocimiento y excelencia. Además, expusieron sus proyectos destacando el valor añadido que los convierte en agentes de cambio desde una perspectiva sostenible.

Los jurados y el premio
La finalidad de este concurso es premiar la excelencia en todos los niveles donde prevalece la valoración del uso de ingredientes nobles, la convivencia con el medio ambiente, las comunidades locales y la sustentabilidad.
Mauro Colagreco, el chef argentino más reconocido en el mundo, es nuevamente presidente del jurado del Prix Baron B – Édition Cuisine, expresa: “estamos muy contentos por la cantidad y la calidad de proyectos que pudimos conocer a través de esta nueva convocatoria. Más de 100 proyectos de todo el país se postularon para concursar en esta nueva edición”, señaló.

Como los años anteriores “es un orgullo poder mostrar la diversidad que tiene la gastronomía argentina representada en estos tres finalistas que muestran la cocina y el trabajo en sintonía con el medio ambiente de sus regiones en Bariloche, Santiago del Estero y Concepción del Uruguay”, comentó Colagreco.

El ganador será premiado con un corcho bañado en oro tallado por el orfebre argentino, Juan Carlos Pallarols. Además, viajará a Francia para poder realizar una pasantía de una semana en Mirazur, el mejor restaurante del mundo, de la mano de Mauro Colagreco.
El emprendimiento local
Amasijo, el proyecto gastronómico de Agustín Kuran, que trabaja con una cocina regenerativa de triple impacto. Kuran es diseñador gráfico de profesión y cocinero autodidacta por elección. Obtuvo una maestría en diseño de sabores y actualmente cursa la carrera de Ingeniería en Alimentos. Abrió las puertas de su restaurante a finales de 2014, junto a su pareja Florencia Nieva.
El proyecto surgió a partir de la investigación en el territorio acerca de las potencialidades en cuanto a materia prima, vajilla artesanal y productos del acervo patrimonial. La inspiración siempre estuvo y está, en la regionalidad e identidad, el respeto por el entorno, y la contribución social.

La cocina regenerativa es un enfoque culinario que se centra en la producción y el consumo de alimentos de manera sostenible y regenerativa. Se preocupa por la calidad y la procedencia de los alimentos, y busca fomentar métodos de producción que sean respetuosos con el medio ambiente.
El plato que presentó para concursar tiene al cabrito como protagonista principal aprovechando de manera integral el producto en tres propuestas diferentes a través de técnicas de cocción y conservación: confitura de cabrito laqueada con mermelada de tuna de las mujeres de La Cañada, charqui de cabrito –técnica ancestral para la conservación de la carne-, y paté de cabrito – donde se aprovecha el resto de la res-. La guarnición es milhojas de zanahorias criollas perfumadas con hierbas frescas y flor de nopalito encurtida. La salsa es una crema y espuma de nopal, una cactácea autóctona. La etiqueta que eligieron para maridarlo es Baron B Brut Nature.
Creado:
3 agosto, 2023