Latidos que nos unen: la gran marcha del alma santiagueña
En Santiago del Estero, el invierno tiene un pulso distinto. Cada julio, las calles se transforman en un escenario vivo, donde el sonido de los bombos legüeros, las guitarras y los fuelles convoca a miles en una ceremonia popular que es mucho más que una fiesta: es un rito colectivo de memoria, identidad y celebración.
Este 19 de julio, la provincia vivirá una jornada inolvidable con la 23ª Marcha de los Bombos y la 11ª Marcha de las Cuerdas y Fuelles Santiagueños, dos expresiones hermanadas por el amor a la tierra y a la música que nos define.
VEINTITRÉS RITUALES: un homenaje en movimiento
En algún rincón de Santiago, un luthier está trabajando en silencio, dando forma a un nuevo bombo. Con manos curtidas, curte el cuero, encastra los aros, tensa los tientos. Sabe que ese instrumento no es solo madera y parche: es herencia, es arte, es grito de monte, y muy pronto hará temblar las calles de la ciudad.
Así se preparan los bombistas. Y no son pocos: entre veinte mil y treinta mil personas llegan cada año desde distintos rincones del país, portando su bombo como si se tratara de un estandarte. Caminarán al amanecer desde los cuatro puntos cardinales para confluir en el corazón de la Madre de Ciudades. Allí, donde nació la patria, la marcha estalla en una sinfonía profunda de sonidos legüeros que emocionan y hermanan.
Cuando las cuerdas también marchan
Pero esta edición no llega sola. Como un abrazo de tradiciones, la Marcha de las Cuerdas y Fuelles Santiagueños también alzará su voz. Con guitarras criollas, violines, bandoneones y acordeones, la música será un puente entre generaciones. Habrá vigilia desde el viernes 18 con música, danza, gastronomía y artesanías frente a la histórica Chimenea Saint Germain, y desde las 8 de la mañana del sábado, marcharán junto a los bombos en una gran celebración compartida.
El evento contará con la presencia de reconocidos artistas como Aldana González, Benja Arce, Cristian Páez, Jorge Luis Carabajal, Los de Alico, La Monada, entre muchos otros, además de academias de danza, agrupaciones folclóricas y luthiers, que expondrán su trabajo como símbolo de resistencia cultural.
Sones que se sienten, caminos que se comparten
El repiquetear de los bombos ya se escucha en la distancia. Es el anuncio de una ciudad que late al ritmo de su historia, donde los pasos y los sonidos se funden en una sola emoción. Porque la Marcha no solo se escucha: se siente en el pecho, en la tierra, en el reencuentro.
No hay coreografía ni partitura. Solo una multitud caminando junta, como si cada golpe, cada rasgueo y cada acorde fueran parte de un gran himno santiagueño compuesto por todos.
Una fiesta libre, gratuita y para todos
Ambas marchas son eventos abiertos y gratuitos, sin distinción de edades, credos o lugares de origen. Es una invitación a ser parte, a caminar con respeto y orgullo por lo que fuimos, somos y queremos seguir siendo.
Este sábado 19 de julio, Santiago del Estero vibra con el alma de su pueblo. Porque celebrar nuestras raíces también es un acto de amor. Y en esta tierra de calor profundo, los latidos nos unen.
Creado:
14 julio, 2025