El ritmo de la marcha lo impone el repiqueteo de los bombos
La fundación de una ciudad no pasa desapercibida para nadie, y mucho menos para los santiagueños. Cada mes de julio nuestra provincia comienza a palpitar un clima distinto, porque en estas fechas se desarrolla la tradicional Marcha de los Bombos.
En el 2003, de la mano de Eduardo Mizoguchi, Freddy García, Froilán González y Tere Castronuovo nació este particular evento que año a año convoca a miles de santiagueños y turistas, en honor a la identidad y cultura ancestral. Marcado por el protagonismo del bombo, la idea fue marchar por distintos puntos de la ciudad Capital al son de este intrumento.
Desde la Dirección de Cultura de la Municipalidad de la Capital y en el marco de los 450° aniversario, 19 de julio de 2003 se celebró la primera Marcha de los Bombos dentro de las actividades para un nuevo aniversario de la fundación de la ciudad.
Con plena vigencia y ya instalada como un evento característico de la provincia, es reconocida a nivel internacional, cuya masiva participación da representación e identidad a una gran parte de la población artística folklórica y popular.
En la noche previa a los festejos, se realizan las tradicionales peñas folklóricas en forma de vigilias, y posee más de 200 adhesiones de todo el país, incluso del exterior, de países como Rusia, España, Italia, México, Bolivia, Chile, Brasil y Uruguay. Desde escuelas de danza hasta espacios culturales y bombistos.
Cabe recordar, que por el contexto de emergencia sanitaria, en el 2020 y 2021 la marcha se celebró de manera virtual, con convocatoria en las redes sociales, con memorias que compartían quienes se conectaban, de las marchas anteriores, anécdotas, fotos y videos.
Incluida dentro del calendario turístico nacional que gestiona el Ministerio de Turismo de la Nación, este año la Marcha de los Bombos no solo se desarrollará en ciudad Capital y La Banda, sino que contará con la participación activa de cientos de bailarines, artesanos y productores de lugares como Clodomira, Lugones, San José del Boquerón, Villa Atamisqui y Las Termas de Río Hondo. Habrá homenaje a los pueblos, con atractivos para quienes asistan y para los turistas que se sumen a la procesión percutiva más grande del todo el país.
