Murió José «Pepe» Mujica a los 89 años: el ex guerrillero que llegó a presidente y se convirtió en símbolo mundial
José «Pepe» Mujica, expresidente de Uruguay y figura icónica de la izquierda latinoamericana, falleció este lunes a los 89 años en su chacra de Rincón del Cerro, a las afueras de Montevideo. La noticia fue confirmada por el actual mandatario uruguayo, Yamandú Orsi, quien expresó: “Con profundo dolor comunicamos que falleció nuestro compañero Pepe Mujica. Presidente, militante, referente y conductor. Te vamos a extrañar mucho, Viejo querido. Gracias por todo lo que nos diste y por tu profundo amor por tu pueblo”.
Mujica había revelado en enero de 2025 que el cáncer de esófago que lo aquejaba se había extendido por todo su cuerpo. En esa entrevista, en la que también dejó un mensaje de despedida, afirmó: “Hasta acá llegué” y pidió transitar su etapa final en paz, alejado de los medios y de la vida pública. Sin embargo, hasta sus últimos días continuó recibiendo visitas de líderes, artistas y periodistas, y participando —cuando su salud se lo permitía— de actividades políticas y sociales.
Tras haber pasado por 32 sesiones de radioterapia en 2024 y atravesar una dura recuperación, Mujica había logrado una breve mejoría. Pero con el avance de la enfermedad, su estado volvió a deteriorarse. El domingo, día de las elecciones departamentales en Uruguay, no pudo asistir a votar. Su esposa, la también exvicepresidenta Lucía Topolansky, lo confirmó en una entrevista radial: “Está en una meseta, está a término. Estoy hace más de 40 años con él y voy a estar hasta el final. Eso es lo que le prometí”.
La historia de Mujica es única. Integrante del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, fue perseguido, encarcelado y torturado durante la dictadura militar. Pasó casi 15 años en prisión, gran parte de ellos en condiciones extremas. Tras recuperar la libertad con la amnistía de 1985, se integró a la vida democrática, fue diputado, senador y finalmente presidente de Uruguay entre 2010 y 2015. Su estilo austero y directo, su vida en la chacra, su viejo Volkswagen, y su perra Manuela —con tres patas— se convirtieron en símbolos de una forma distinta de hacer política.
A nivel internacional, Mujica fue admirado como un referente moral por su coherencia, su discurso humanista y su humildad. “La presidencia fue una pavada”, decía con ironía, como si su paso por el poder fuera apenas un capítulo menor en una vida marcada por la lucha, la resiliencia y la filosofía de lo simple.
Cumpliendo su último deseo, sus restos serán enterrados en su chacra, junto a Manuela, “su compañera fiel”. Se va un hombre que, como él mismo dijo, vivió “una novela”. Para muchos, una de las más intensas y auténticas de la historia reciente de América Latina.
Creado:
13 mayo, 2025