Asesinan brutalmente a un joven bandeño en su supuesto «ajuste de cuentas» y lo tiran en la calle

Un sangriento asesinato generó consternación en el barrio IV Centenario de La Banda, cuando el cadáver de Rubén Agustín Maguna apareció tirado con tres cuchillazos y signos de haber recibido una despiadada golpiza.

El brutal crimen, que supuestamente ocurrió en horas de la madrugada, fue descubierto por una mujer que llevaba a su hija la escuela y encontró sobre el pastizal a Maguna tirado boca arriba, completamente ensangrentado.

Junto a otros lugareños, la mujer informó a los Guardavidas que se encontraban en la zona y estos confirmaron que la víctima no tenía signos vitales. De inmediato todo el lugar se llenó de móviles policiales.

El Dr. Nicolás Santillán, fiscal de turno, arribó al lugar y supervisó minuciosamente el trabajo de los uniformados. El médico de Sanidad indicó que le cuerpo de Maguna tenía tres heridas de arma blanca entre el cuello y el abdomen.

Según el resultado de la autopsia las heridas punzopenetrantes le perforaron los pulmones y riñones. Además tenía un corte con arma blanca a la altura de la boca y otro en una de sus cejas. Lo saña con la que se cometió el crimen se notó en las fracturas de que tenía Maguna en la cara.

Fuentes judiciales y policiales cercanas a la investigación indicaron que al parecer, una vez herido con cuchillo, lo golpearon con un objeto contundente: podría tratarse de un palo o un hierro de gran tamaño.

La víctima —que residía sola y a 200 metros del lugar donde apareció sin vida— no tenía ninguna de sus pertenencias por lo que durante los primeros minutos permaneció «NN» hasta que su familia lo reconoció.

Peritos de la División Criminalística junto con personal del Departamento Homicidios y Delitos Complejos realizaron todos los trabajos de fotografía, planimetría y recabaron declaración de los vecinos y familiares de a víctima.

Más tarde, el cuerpo fue trasladado a la Morgue Judicial del Hospital Independencia donde fue examinado por el forense quien confirmó las lesiones y la golpiza que la víctima recibió por parte de su o sus agresores.

Al cierre de la presente edición los investigadores —bajo la dirección del Dr. Santillán— buscaban el escenario del crimen ya que donde fue hallado no habría sido ultimado pues no había sangre alrededor de la víctima, y también reconstruían sus últimas horas con vida.

La golpiza que sufrió Maguna llamó la atención a los investigadores ya que a través de ellos se puede determinar que lo atacaron con saña. Los detectives analizaban dos hipótesis y ambos tenían un denominador común: un ajuste de cuentes.

Minutos después de la medianoche el fiscal esperaba «luz verde» para las requisas.

Antes había sido amenazado 

Si bien los investigadores y las autoridades judiciales trabajan con total hermetismo, EL LIBERAL pudo saber que las pesquisas habrían tomado conocimiento de que Maguna, quien tenía una hija y actualmente estaba en pareja, habría recibido días atrás amenazas de muerte.

Al parecer mantenía una disputa que está siendo investigada por los efectivos. Al consultar si Maguna tenía antecedentes, fuentes confiables indicaron que en el año 2014 había sido denunciado por lesiones y amenazas por su ex pareja, causa que ya prescribió.

El testimonio del círculo íntimo de la víctima será crucial para que los detectives puedan reconstruir sus últimos movimientos y quién o quiénes fueron las últimas personas que lo vieron con vida.

«Era una persona muy buena y muy querida por todos»

Conocida la noticia del brutal asesinato que estremeció a los vecinos de La Banda, las redes sociales se inundaron de mensajes de profundo dolor por la pérdida y condolencias para sus familiares.

Mientras que en el lugar del crimen, un amigo de la infancia —entre lágrimas— expresó: «Nos conocíamos desde que teníamos 10 u 11 años. Compartimos muchas cosas, jugamos a la pelota, no hemos criado».

«Recién me llamaron para avisarme. Yo estaba trabajando. Cuando llegué no podía creer. El sábado nos vimos en la cancha. Siempre tenía buena onda. Era muy conocido Rubén y muy querido también. Me contó que estaba trabajando en un gimnasio, haciendo limpieza. No lo puedo creer», enfatizó profundamente entristecido.

Analizan las cámaras de seguridad

Al cierre de la presente edición, por orden el Dr. Santillán, efectivos del Dpto. de Investigaciones realizaban un relevamiento por inmediaciones de la casa de la víctima en busca de las cámaras de seguridad.

Éstos sospecharían que Maguna fue «sacado» de su casa por su o sus agresores y llevado hasta otro sitio donde fue atacado y luego depositado en la mencionada intersección —un lugar demasiado concurrido— a la vista de todos.

En el marco de la causa, los investigadores junto con el representante del Ministerio Público ingresaron a la casa de Maguna pero el lugar se encontraba perfectamente cerrado con todos sus bienes ordenados.

Fuente: El Liberal