La incertidumbre amenaza al básquet en Bandera: se espera una resolución ante la posible salida de los clubes ceresinos
La principal preocupación radica en el impacto que esta posible separación podría tener en la Asociación Noroeste Santafecino
El futuro del básquet en Bandera enfrenta una compleja encrucijada que genera una creciente preocupación en la comunidad deportiva. Más de 100 jóvenes que integran las divisiones inferiores y el equipo de primera división se encuentran en un limbo, mientras se aguarda una decisión clave sobre la permanencia de los clubes ceresinos en la Asociación Noroeste.
La inquietud ha surgido tras el anuncio oficial de los clubes Ceresinos, que han manifestado su intención de abandonar la asociación actual para unirse a la Asociación Morterense. Sin embargo, este movimiento no se concretará a menos que los clubes de la Morterense unan sus voces en un acuerdo unánime, algo que, según fuentes extraoficiales, no sería una tarea sencilla.
La principal preocupación radica en el impacto que esta posible separación podría tener en la Asociación Noroeste Santafecino. La salida de los equipos de Ceres generaría un efecto dominó que podría llevar a una virtual disolución de la asociación, dejando a instituciones históricas como Unión y Juventud sin competencia para la próxima temporada.
Mientras tanto, cientos de jóvenes talentos se ven forzados a permanecer sin actividad competitiva, lo que ha desatado un sentimiento de frustración y desesperación en la comunidad. La consigna “Queremos Jugar al Básquet” ha resonado con fuerza en las redes sociales, reflejando el deseo de los chicos de regresar a la cancha y continuar desarrollando su pasión por este deporte.
El tiempo corre y la falta de una resolución definitiva mantiene en vilo a jugadores, entrenadores, y padres de familia. La búsqueda de un diálogo constructivo entre las partes involucradas se vuelve cada vez más urgente, ya que cada día que pasa sin respuesta se traduce en más incertidumbre sobre el futuro del básquet en Bandera.
La comunidad deportiva espera que se tomen decisiones que prioricen el bienestar de los jóvenes y la continuidad del básquet en la región. Sin un acuerdo, el futuro del deporte en esta localidad podría sufrir un golpe devastador, poniendo en riesgo la formación y desarrollo de una nueva generación de jugadores.
