Bibliotecas Populares autosustentables

Las Bibliotecas Populares en Argentina son un pilar importante sobre el que se asienta el sistema educativo del país. Hoy en día peligra la subsistencia de estas históricas instituciones, a causa de que el país se encuentra en una situación económica penosa. Y además por los ajustes propuestos por el gobierno nacional de Javier Milei a través de diferentes medidas con el objetivo de torcer el fatídico destino del país.

Son instituciones de la sociedad civil que revisten la forma de asociaciones civiles, pero que proveen servicios que son de interés social por ser esenciales a la movilidad social, fomento de la equidad e identidad sociales. Originariamente pensadas por Sarmiento como un engranaje más de lo que debiese ser un sistema integral educativo para la República Argentina. Siempre ponderando su importancia y necesidad como elemento de soporte y profundización de la escuela pública.

Algo que Sarmiento tenía en claro era su relevancia para el progreso de la Nación y la necesidad de que tanto el esfuerzo como el trabajo sea conjunto entre sociedad y gobierno. Cuestión que muchas veces se olvida o deja de lado por el carácter de derecho humano que esta reviste. A diferencia de un bien público, la educación es un bien cuasi público por ser, por un lado, parcialmente exclusivo ya que el sector privado puede proveerlo de manera eficiente. Y por el otro, porque presenta competencia por los recursos, ya que un libro o un banco que ocupa una persona no puede ser ocupado por otra, cosa que no ocurre por ejemplo con el aire.

Por todo esto es importante repensar la forma en que las Bibliotecas Populares logran hacerse de recursos para brindar servicios de calidad. Pero por sobre todo para poder garantizar la regularidad en el servicio sin importar el color político del gobierno de turno o la situación económica que atraviese el país. Un paso hacia la auto sustentabilidad y ejercicio de su soberanía.

Por Exequiel Santiago Pérez López