La algarroba, el fruto que gana terreno en la variedad gastronómica y nutritiva

Por Omar Estanciero

En Huiñaj Atun (Atamisqui, Santiago del Estero) se desarrolló la 4° Algarrobeada Red de Guardianes del Monte de Atamisqui 2023, donde claramente se ha puesto de manifiesto un remarcado interés de parte de asociaciones, nuevos pequeños productores y feriantes que apuntan en revalorizar el aprovechamiento integral de la algarroba como alimento.

La actividad fue posible gracias al apoyo, además del INTA, del Pro Huerta, la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca y el Ministerio de Economía de la Nación, la Facultad de Agronomía y Agroindustrias (UNSE), Instituto de Estudios Ambientales y Desarrollo Rural de la Llanura Chaqueña, Cooperativa Agronaciente, Propar, el ministerio de Producción y la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la provincia, la familia Serrano Maguicha y los capacitadores de la cuarta algarrobeada: José Mitre y Nancy Campos.

El calor no fue impedimento alguno para conocer los logros obtenidos de parte de productores y emprendedores en materia de desarrollo de la producción y el agregado de valor de las vainas de algarroba, para fomentar en otras personas una apuesta a la producción del algarrobo y sus derivados.

Está claro decir que este fruto presente en gran parte del territorio provincial es utilizado como insumo para realizar harinas para alimentación humana y forrajes para animales, con grandes propiedades nutricionales.

Los presentes Huiñaj Atun hemos conocido con mucha gratitud la experiencia de trabajo de la Red de Guardianes del Monte, quienes junto a técnicos del INTA, de la UNSE y de distintas instituciones y asociaciones, nos transmitieron sus saberes sobre la algarroba, para fomentar nuevas experiencias de producción y el aprovechamiento integral de este fruto típico del monte santiagueño.

Con las altas temperaturas que tenemos en Santiago, el algarrobo blanco (prosopis alba) es justamente un árbol tan noble que además de brindar buena sombra, se adapta a la sequía, fertiliza, aporta materia orgánica y puede recuperar el suelo que está degradado. Mirá si será de generoso que tiene otro uso valioso y en crecimiento: el aprovechamiento de su vaina o fruto como alimento.

La agricultura campesina está transitando una revolución increíble, sin el uso de fertilizantes y otros químicos industriales, una línea de trabajo que está en crecimiento con la elaboración de alimentos muy saludables y la algarroba es uno de ellos, un superalimento que contiene calcio, hierro, magnesio, fósforo, zinc, vitaminas del grupo B, proteínas e hidratos de carbono saludable.

Alimentación saludable

Se ha visto que la algarroba está presente en la elaboración de arropes, jaleas, algarrobina, harina, infusiones y una amplia variedad de panificados y confituras que ganan terreno en el mundo de la gastronomía, pocas veces explorado, estando tan acostumbrado nuestro paladar a otro tipo de sabores. Hay otra manera de acercarnos a un fruto de alto valor nutricional, sin agregados industriales y muy exquisito.

Tan solo para poner un ejemplo, las semillas de la vaina de la algarroba contienen azúcares naturales que es recomendable para endulzar infusiones, en reemplazo de la azúcar industrial, según nos contó la Ing. Verónica Guzmán, directora técnica de la Planta de Molienda de Frutos Autóctonos de la Facultad de Agronomía y Agroindustrias de la UNSE.

Nancy Campos, emprendedora santiagueña de alimentos a base de algarroba, sostiene con gran sabiduría: “si no tienen harina, compren. Yo empecé así hasta que aprendí a hacer la harina y nunca más compré. De nosotros depende cuidar la algarroba, porque algún día se puede acabar y pueden faltar alimentos en el mundo, y este fruto es una riqueza que la tenemos aquí en Santiago”.

Una grata experiencia que vale la pena repetirla, y esperar la convocatoria para participar de la quinta algarrobeada, en el lugar pronto a definir y conocer más y mejores experiencias enriquecedoras y saludables.